• Cuando uno se relaciona sentimentalmente con otro, debe ser con el fin de casarse.
• Una relación sin ese objetivo es un “flirt” (Nota: conviene reconsiderar aquí el noviazgo entre adolescentes, noviazgos larguísimos, noviazgos entre estudiantes que tienen seis años de carrera por delante, etc.).
• El significado de la palabra “flirt” es: coquetear, revolotear, corretear, arrojar.
• A toda mujer le gusta llamar la atención de un hombre, que le halaguen sus galanterías, y a todo hombre le gusta conquistar, pero:
La realidad del flirt:
- Es engañar: Si alguien se fija en nosotros y nosotros, sin tener real interés en el/ella le alimentamos el sentimiento es un acto de egoísmo, desconsideración, crueldad.
- Es jugar con el corazón como con una pelota de fútbol.
- Exige intimidades peligrosas, como la pasión. Precisamente porque no están controladas por el amor. (Proverbios 6:27-28).
- Libera una cadena de estímulos destinados a producir reacciones sexuales: Vista, acercamiento, palabritas insinuantes, contacto físico, besos de pasión, caricias íntimas, etc.
Resultado del flirteo:
- Desilusión, frustración, vergüenza, bronca.
- Conciencia de haber sido “manoseado” física y psíquicamente.
- Desgaste de energía emocional. Cuando llega el amor verdadero, ya no estamos enteros, hemos ido dejando “pedazos” en cada flirt. Estamos gastados, manoseados, impuros.
- Vemos a aquellos que nos conocieron íntimamente (pecado) y no podemos tener con ellos una relación normal, estamos tensos.
- Lo que se siembra, se cosecha. (Gálatas 6:7). Si hemos roto un corazón y no nos importó, otro romperá el nuestro. Es una ley.
Elementos que incitan al flirteo:
- Miradas intencionadas, actitudes, vestimenta, provocaciones. (1º Corintios 13:5).
- En el reino de las tinieblas, ser “sexy” es algo así como una virtud, un privilegio. En el Reino de Dios, eso es pecado, falta de amor, descontrol.
IMPORTANTE: SE DEBE SEMBRAR BIEN, PARA COSECHAR BIEN. (Gálatas 6:7; proverbios 20:20).
• Deben desarrollar una actividad en la obra del Señor:
• Deben : TRABAJAR + BENDECIR + SEVIR
• Nuestra conducta en el hogar, nuestra actitud con los padres, abuelos, etc., determina el hogar que vamos a tener después.
• El casamiento no va a ser el “milagro” de cambiar a una chica desordenada, sucia, contestadora, rebelde, o a un muchacho vago, irresponsable, irrespetuoso.
• La chica que no se prepara para cuidar un hogar, no será una buena esposa. Si solamente estudia una carrera, trabaja fuera casa no más, pasea, mariposea, etc. pero no sabe cocinar, limpiar, organizar, manejar el dinero, comprar bien, etc. ¡Va a arruinar su hogar!.
• El muchacho que no tiene responsabilidad, no tiene, ni busca trabajo fijo, no piensa para el futuro, sólo vive con los auriculares en el oído escuchando música. ¿qué le va a ofrecer a su amada?. ¿promesas vagas?.
PREPARÁNDOSE PARA EL NOVIAZGO
- Ser prudentes. (Mateo 10:16; Proverbios 14:15; 11:22).
- No ser demasiado crédulos: Este consejo es más bien para las mujeres. Las mujeres se conmueven fácilmente, son románticas, sensibles, tienen la ilusión de ser el “gran amor” de todo hombre que la mira con interés. Decir “te quiero” es muy fácil para la mayoría. Pero conviene cuidar de no gastar el precioso corazón en sentimientos efímeros o falsos. (Proverbios 4:23).
- Que la mujer no tome la iniciativa: Esa es la moda del reino de las tinieblas, pero es anti-creacional. A ningún hombre le gusta ser “atrapado”, salvo que tenga serios problemas en su crianza, que luego traerán graves problemas matrimoniales.
- Tener fe, pureza, paciencia. (1º Timoteo 4:12; Salmo 37:4-5; 38:9; Romanos 12:2).
- No estar ansiosos: Muchos están siempre “a la pesca”, ven en cada persona del sexo opuesto al futuro marido o esposa y esto lo hace una persona desagradable, ofende al Señor pues demuestra que no estamos descansando en Él.
- No estar apurados: La prisa e impaciencia fue la causa de tantos y tantos matrimonios desdichados. Y eso es grave. Si uno yerra en otras cosas (trabajo, carrera, compras, negocios, etc.) lo puede componer. Pero si uno se equivoca en el matrimonio, es muy g rave porque es para toda la vida. El apuro es como decirle al Señor: “Bueno, Dios, ya esperé bastante tiempo. ¿Tú no haces nada?. Está bien, déjalo por mi cuenta, yo me ocuparé solo del tema”.
- Orar mucho: Buscar el rostro del Señor, su guía, su Palabra. Confiar en Él, en su cuidado amoroso sobre nuestras vidas. Tener paz y calma.
- Buscar en los lugares adecuados: Dentro del pueblo de Dios. (2º Corintios 6:14). Dentro de la propia congregación, en otras congregaciones, en retiros, campamentos, reuniones de jóvenes, etc. No vayas a las discotecas, confiterías, etc. a buscar tu compañero/a. Muchas preciosas vidas se arruinaron y muchas lágrimas se han derramado por elegir mal. (Recuerda el caso de Sansón y Dalila).
- Tener un tiempo para conocer a la persona que nos gusta: Esto debe ser sin que ello modifique la relación dada hasta el momento. En algunos países es común una etapa de pre-noviazgo. Son más que amigos, pero no son novios. Por ejemplo en Chile se los llama “pololos”. En Norte América “boy friend” o “girl friend. En Argentina “amigovios”. Pero en realidad ¡no existe esa etapa!. Cuando dicen “salgo con Fulano…”, etc,, debieran decir y considerarse novios, y el noviazgo debe ser para casarse, pero lamentablemente muchos no toman esto en serio.
- Mucho tiempo de conversación: El pastor Ángel Negro propone esta alternativa: Antes de ponerse de novios, tengan mucho tiempo de conversación, de conocerse uno al otro, como personas, como amigo/a especial. Aún, si fuese posible, dar a conocer el uno al otro sus sentimientos “especiales”, pero no ir más allá, ni tener contacto físico alguno. Tomando juntos un tiempo de conocerse y orar antes de ser novios.
En esta etapa toda la comunidad debe colaborar. ¿Cómo? DEJÁNDOLOS EN PAZ. No “cargarlos”, ni hacerlos sentir incómodos. Las “cargadas” muchas veces han nublado y perturbado la decisión que deben tomar. Si luego de esta etapa sienten que deben hacerse novios, muy bien. Si descubren que no son el uno para el otro, lo dejan allí. Es mejor que se parar ahí y no que se rompa un noviazgo que dejará heridas en los interesados y en la comunidad también.
- El consejo de sus padres y mayores en la Fe. Es muy importante que cuando se despierta el interés por de un joven por una chica o viceversa, antes de demostrarlo entre si, que los primeros que lo sepan sean sus padres y luego aquellos que les discipulan o que pastorean, pues sabrán darles el consejo adecuado con amor, basados en la experiencia que da los años, la revelación del Espíritu Santo y los conocimientos que tengan de la otra parte, como persona, de su entorno familiar, y amistades.
“Uno se casa con también con su familia”. Esta es una afirmación hecha por muchos y es tan cierta con el dicho que dice: “Dime con quien andas y te diré quien eres”. En la mayoría de los casos las familias influyen directa o indirectamente en el nuevo matrimonio, de tal manera que los conceptos, criterios, valores .,y problemas tienden a injertarse, afectándoles, creando en algunos problemas, tristezas y conflictos no deseados. Y en otros un aporte invalorable.
LLEGANDO AL NOVIAZGO.
Cinco luces indicatorias.
Ninguna de estas luces es concluyente por sí misma, pero juntas pueden servir de guía para tomar una decisión:
1. Afinidad espiritual. (2º Corintios 6:14-17):
No basta que “profese” ser creyente. Pregúntate:
- ¿Es su compromiso al señorío de Cristo el mismo que tengo yo?.
No es una pregunta para juzgar a nadie, pero sí para considerar con seriedad. Don Sutton en “Vino Nuevo” dice: “Cuando un creyente tiene hambre de Dios y desea servirle a toda costa, le estaría abriendo la puerta a las dificultades si se involucra con alguien que no desea más que calentar el banco de atrás de una iglesia por el resto de su vida”.
- ¿Me ayuda esta relación a crecer espiritualmente? ¿Me aleja de Dios y su llamado para mi vida?.
- ¿Me aleja de la Iglesia y de los hermanos?
- ¿Me aleja o me acerca de la oración, la lectura de la Biblia, la obediencia, etc.?.
2. Afinidad intelectual – cultural:
Cuando las familias son muy distintas en cuanto a valores, costumbres, gastos, gustos, nivel económico o intelectual, etc. hay que prestar mucha atención.
La tendencia de los jóvenes es pensar que el otro va a darse cuenta y cambiar, o que podrán compensarse, o complementarse, pero la experiencia demuestra que no siempre es así, por el contrario en muchos es motivo de grandes conflictos difíciles de solucionar, porque no se trata necesariamente de pecados, sino de formas de vivir muy distintas y en algunos casos incompatibles, aunque por separado funcionen bien.
Es recomendable que estén equiparados o que el varón esté un paso adelante, para evitar problemas en el ejercicio de la autoridad que le fue dada por Dios al varón en el hogar.
• Se debe prestar atención muy detenidamente a los siguientes temas:
- Niveles culturales.
- Cultura familiar.
- Gustos.
- Costumbres.
- Cuestión de mentalidad.
3. Afinidad emocional – sentimental:
- Deben estar enamorados.
- Deben gustarse ambos, no uno solo.
- Si el otro no manifiesta interés, entonces no funciona.
4. Afinidad física:
- Deben gustarse, sentir atracción física.
- No tienen por que ser perfectos físicamente, pero algo en su físico, mirada, manos, gestos, voz, etc., debe atraerlos.
5. El sentir de nuestros mayores:
- Es bueno conocer la opinión de nuestra autoridad natural y nuestra “cobertura” espiritual. O sea, los padres, los pastores, los líderes…
- ¿Cómo ven ellos ese noviazgo?. Si todos lo ven mal, mejor abrir los ojos y escuchar consejo.
¿CUÁLES SON LAS LIMITACIONES DEL SEXO EN EL NOVIAZGO?
- Dios nos hizo seres sexuales y lo hizo para nuestra felicidad. No es malo sentir atracción sexual. Lo malo es darle rienda suelta en la mente y en los hechos.
- Todo manoseo que excita sensual o sexualmente, está mal fuera del matrimonio. Un beso o un abrazo pueden ser manifestaciones de cariño, pero también un beso o un abrazo pueden ser manifestaciones de pasión. CADA UNO, CON ORACIÓN Y DEPENDENCIA DEL SEÑOR, con honestidad, pureza y transparencia debe saber hasta dónde puede ir sin entrar al pecado.
- Cada uno debe controlar, gobernar sus pensamientos acciones y reacciones. Buscar tener un noviazgo sin nada de qué avergonzarse, feliz y dichoso, que “halle gracia delante de Dios”.
o Los muchachos y las chicas, que tengan cuidado con las manos.
o Las chicas y los muchachos que no tengan miedo de frenar cuando sea necesario. Y que no sean provocativos/as con sus ropas y modales.
- Nunca olvidar que, aparte de novios, son hermanos en Cristo y deben cuidarse la honra unos a otros. Que en el futuro serán padres de los hijos que les dará su matrimonio y tienen la obligación de legarles una herencia de pureza, integridad y transparencia.
- En cuanto a la “prueba de amor” que se usa en el reino de las tinieblas, en el Reino de Dios también existe pero es diferente. La “prueba de amor” de los novios discípulos de Cristo es protegerse, guardarse y respetarse mutuamente hasta el día del casamiento.
- Eviten los lugares de tentación: Quedarse solos en una casa, en el auto o en lugares oscuros y apartados, les da sensación de “privacidad” y esta “privacidad” tiende a llevar a transgredir límites, y de hecho pecar.
- Terminemos preguntándonos: ¿Hay algo más hermoso en la Tierra que un noviazgo y matrimonio comprometidos al señorío de Cristo?.
GUARDA TU CORAZÓN
PORQUE DE EL MANA LA VIDA.
(Proverbios 4:23).