El Pecado

Dr. Rubén Jorge Rodríguez

Bosquejo sobre el tema “El Pecado”, expuesto el 21 de Enero de 2005. Retiro de Adolescentes, Jóvenes y Familias “LOS ROBLES 2005” Pontevedra – Pcia. de Buenos Aires.

Lectura Bíblica Romanos 6:1-3

EL COMIENZO...

Dios creó en el huerto de Edén primero a Adán y luego a Eva como su compañera idónea, y les dijo que se enseñorearan de lo creado, que se multiplicasen, que podían comer de los frutos del huerto, pero que no comieran del fruto de un árbol determinado que no sabemos cual fue, pero que Dios concretamente dijo de este no.

Dejaron de considerar como absoluta esta prohibición de Dios .

La minimizaron (“¡Bueno no exageremos, no es para tanto, no lo tomemos al pié de la letra!”).
La relativizaron (“¡Hay que ver si es tanto así como dijo Dios!”. “¡Si el es bueno!”. )


¿Cuál fue el pecado de Adán y de Eva?

Pasar por alto lo determinado por Dios, transgrediendo los límites.


¿Qué hubo en el corazón de ambos?.

Malicia.


¿Cuáles eran?.

Rebeldía.
Desobediencia.


¿Cuál fue el primer pecado de Eva?

Dejarse seducir por la serpiente, y no consultar con su marido.


¿Cuál fue el primer pecado de Adán?

Sujetarse a su mujer, y así desobedecer a Dios.


¿Por qué ambos pecaron?

Porque dejaron de Temer a Dios.



EL PECADO EN TRES PERÍODOS EN LA HUMANIDAD



El llamado “CREACIONAL”:

(Este período de tiempo, se mide desde Adán y Eva, hasta que Israel recibió las leyes de Dios a través de Moisés).

Dios había establecido leyes morales, de honra a Dios y de convivencia escritas en el interior de cada ser humano, al haber sido creado a su imagen y semejanza, y también en situaciones particulares comunicaba sus propósitos y guía directamente o por medio ángeles o mediante “teofanías”.

Pero eran transgredidas, por no temer a Dios.


El llamado “BAJO LA LEY”:

(Período de tiempo considerado entre el momento en que Israel recibió las Leyes a través de Moisés, hasta la muerte de Jesús en la cruz del calvario) .

Fueron dadas por Dios, para ayudar a su pueblo de Israel a obedecerle.

Pero su pueblo en lugar de usarlas para fortalecer su relación con Él, las tomó como “reglamentos” a cumplir, en forma metódica y fría, desconociendo lo que Él buscaba de ellos, cayendo en la “religiosidad”.


El llamado “BAJO LA GRACIA”:

Dios al ver que ninguna persona vivía de acuerdo a lo que el esperaba de ellos y queriendo tener un pueblo que le fuese propio, no de “robots”, ni de “religiosos”. Sabía que si seguían así ninguno sería salvo. Entonces envió a su Hijo Jesucristo para reconciliarlos con El, pagando el precio del castigo que cada uno merecía, padeciendo en la cruz ocupando el lugar de cada uno. Pero como su pueblo le rechazó, lo extendió a toda la humanidad.

Decimos que murió en nuestro lugar, al ocupar pagando por nuestros pecados, porque el Padre los cargó sobre Jesús.

Este perdón alcanza solamente a aquellos que le reconocen como su único Señor, rindiéndose a El, reconociéndole como el Hijo de Dios y con profundo arrepentimiento, confesándole sus pecados, pidiéndole perdón, entregándose a El para que sea el Nuevo Dueño de sus vidas, bautizándose en agua. Y así comienzan a ser discípulos de Jesús.

Muchos rechazaron este “REGALO” de Dios.

Otros lo tomaron como una religión (parecido a lo que había hecho Israel en la antigüedad), pero no se entregaron a Jesús y su vida continúa en pecado.

En cambio otros, han reconocido a Jesús como su Señor y se entregaron a El, pero aún conviven con pecados. ¿Es posible que esto último ocurra...?. ¡Lamentablemente si! ¡Pero Dios quiere verte libre, quiere verte bien! ¡Y esto es posible!.



EL SIGNIFICADO DE ALGUNAS PALABRAS TRADUCIDAS COMO PECADO EN LA BIBLIA


En el Antiguo Testamento:

“HATTAT” (Hebreo) “ERRAR AL BLANCO” (Éxodo 32:20).
“PESHA” (Hebreo) “REBELIÓN” (Atenta contra el gobierno de Dios) (Proverbios 28:13).
“SHAGAH” (Hebreo) “EXTRAVIARSE” (Levítico 4:13).
“AWON” (Hebreo) “ESTAR TORCIDO” (Muchas veces traducido por iniquidad. Incluye el “estado de culpabilidad”). (1º Reyes l7:l8).

En el Nuevo Testamento:

“AMARTIA“ (Griego) “ERRAR AL BLANCO” (Incluye la idea de “fracaso” -“culpa” -“malas acciones concretas”) (Es la más usada en el N. T).
“ADIKIA” (Griego) “MALDAD O INJUSTICIA” (Romanos 1:18).
“PARABASIS“(Griego) “TRANSGRESIÓN“ (Romanos 4:15).
“ANOMIA“ (Griego) “SIN LEY – DESORDEN” (Mateo 24:12).
“ASEBIA“ (Griego) “IMPIEDAD” (Tito 2:12).


¿Qué es el pecado?

Toda maldad es pecado (1º Juan 5:l7)
Es transgredir lo establecido por Dios (1º Juan 3:4)
Todo lo que no proviene de Fe. (Romanos 14:23)


¿Que produce el pecado?.

Indignidad de estar en la presencia de Dios.
Incapacidad de hacer la voluntad de Dios. (Es como una piedra, en un caño que conduce agua).
Sentimiento de estar en infracción ante todo y todos. (Lo que me recuerde a Dios)
Insensibilidad ante la Palabra de Dios. (Al leer la Biblia o al escuchar la palabra de Dios).


¿SE PUEDE PECAR POR....?



POR AMOR...?

• Por un falso amor al otro /a.....No hacerle mención sobre su pecado, (por temor a quedarse solo u ofenderle.

• Por un falso amor al otro /a.....Acompañarle o participar de sus pecados, (por temor a quedarse solo u ofenderle.

• Por un falso amor al otro /a.....Ocultar sus pecados, convirtiéndose sin querer en encubridores y en algunos casos cómplices.

• Por un falso amor al otro /a.....Oír secretos “inconfesables”, poniendo sobre su propia espalda el pecado de otro prometiéndole no contárselo “ni siquiera a los pastores”, comenzando así su propia ruina porque está cargando como propio un pecado ajeno.

• Por un falso amor al otro /a... Entregar su cuerpo o partes de el, para que el otro /a vea que le ama.

• Por un falso amor a si mismo Expresado en soberbia y orgullo.

• Por un falso amor a si mismo”El hedonismo”, rendir culto al cuerpo.


POR TENTACIÓN...?

• Por dejarse llevar por la sensualidad del otro.

• Por alcanzar metas y objetivos ilícitos.

• Por probar lo oculto

• Por conocer lo desconocido.


POR PASIÓN...?

• Por dejarse llevar por impulsos sexuales.

• Por dejarse llevar por sentimientos.

• Por dejarse llevar por razonamientos fuertes.


POR DEFENDER LA VERDAD...?

• Generando conflictos.

• Siendo implacables.

• Provocando divisiones.

• Dividiendo congregaciones.

Hay verdades objetivas, “lo que concretamente es”. Y hay verdades subjetivas, “lo que yo supongo o creo, o estoy convencido que es”. Esta última generalmente es la que nos lleva a pecar.


POR OBEDIENCIA...?

Cuando obedecer implica ser partícipes de:

Pecados morales. Lamentablemente a veces, padres, madres, tíos, padrastros, etc., abusan en cualquiera de sus formas sexualmente o hacen que lo sean o se sometan por obediencia.

Mentiras. Por obediencia mienten

Participar en ilícitos. Robo, hurto, mendicidad, etc.


POR CONVENIENCIA...?

Aunque a veces no guste hacerlo o decirlo, pero se hace por conveniencia. Apuntando al objetivo deseado. ¡Los fines no justifican los medios¡



¿SOY VENCIDO POR LO MALO...?


El pecado en dos formas...

• Pecados de acción: Aquello que uno hace, dice u oye, que no agrada a Dios.

• Pecados de omisión: Aquellos producidos por no haber hecho, dicho, lo que se debía, y en el tiempo debido.


Tres pecados que indignan

• La rebeldía.

• La insolencia.

• La desobediencia.


¿ Por qué peco...?

• Porque me atrae o

• Porque me gusta o

• Porque me conviene.

Y el diablo solamente lo estimula....


La profundidad de mi pecado

• La malicia: Son las malas inclinaciones y motivaciones en lo profundo del corazón y que otros no conocen. Ya en este estado es pecado.

• La maldad: Es aquello malo en el interior del corazón de lo cual se es conciente y luego se expresan en Hechos concretos, ya es pecado.

• El pecado: Es aquello transgrede la voluntad de Dios y que vemos como algo concreto, sea en nuestro interior como en hechos.

SÓLO HAY VERDADERO ARREPENTIMIENTO DE PECADO, CUANDO SE TOMA CONCIENCIA QUE HEMOS OFENDIDO A DIOS QUE ES SANTO.

Es como si Dios Santísimo estuviese detrás de un cristal muy fino y transparente, y nosotros tomamos de una zanja barro en estado de descomposición y lo arrojamos una o varias veces hacia El, ese fino cristal es manchado, impidiéndonos ver su gloria, ofendiéndole y separándonos de El, aunque su santidad no ha sido alterada, nuestro pecado ha producido una barrera entre Dios y nosotros.

Hay algunos que le confiesan a Dios su pecado y le ruegan perdón, no porque han tomado conciencia que ofendieron a Dios, sino porque quieren ser libres de la consecuencia de su pecado, del olor a zanja que queda en sus manos y en sus ropas. No lo soportan mas, quieren ellos “parar de sufrir”, pero no lo hacen con arrepentimiento por haber ofendido a Dios.


¡Hay muchos que se mimetizan como discípulos de Cristo...!

• Toman sus formas.

• Adoptan su vocabulario.

• Utilizan las mismas expresiones.

• Cantan sus canciones.

• Manifiestan creer en Jesús.

• Piden ser bautizados.

• Algunos quieren colaborar en el servicio a Dios.

Piensan: “ ¡Sino, no me sentiría (o sería) incluido en el grupo, o la congregación…!”.
Se los considera cristianos, pero NO HAN NACIDO DE NUEVO EN CRISTO JESÚS.

1. NO SE PUEDE TENER LA VIDA DE CRISTO, SIN MORIR A LA VIDA DE PECADO (Sin hacer un corte definitivo).

2. ¡NADIE PUEDE TENER DOS VIDAS A LA VEZ...!

3. UNO ES PLENAMENTE CONSCIENTE DE SU PECADO, CUANDO SE ENFRENTA A LA SANTIDAD DE DIOS.


El “Nuevo Nacimiento”

Es un glorioso “misterio de Dios” y “obra del Espíritu Santo” (ocurren y vemos los hermosos resultados).

Pasos en el “Nuevo Nacimiento”:

1. Lo primero: CONVICIÓN DE PECADO. (Ser conscientes de haber ofendido a Dios).

2. Esto lleva a: ARREPENTIRSE. (Experimentar profundo dolor interior por haber ofendido a Dios – incluye la sensación de indignidad, aborreciendo lo malo que hizo, dijo, pensó, oyó, etc. y con la firme decisión de no volver a hacerlo).

3. Esto lleva a: CONFESARLE A DIOS LOS PECADOS.

4. Esto lleva a: ROGARLE SU PERDÓN.

5. Esto lleva a: ENTREGARLE LA VIDA A JESÚS, PARA QUE DE AQUÍ EN MAS, EL GOBIERNE LA VIDA, Y HACER SU VOLUNTAD.

6. Esto lleva a: DESEAR ESTAR EN LUZ, QUE NO HAYA NADA OCULTO, CONFESANDO LOS PECADOS (Es importante que la confesión de situaciones delicadas o íntimas, sea con sus pastores).

7. APARTARSE DEL PECADO Y RESTITUIR TODO LO QUE SEA POSIBLE.

8. ANSIAR Y SER BAUTIZADO EN AGUA.


El que verdaderamente ha “Nacido de Nuevo”, ¡ABORRECE EL PECADO...!



¿...Qué debo hacer si pequé después de haberme rendido a Jesús...?

Lo primero: CONVICCIÓN DE PECADO.(Ser conscientes de haber ofendido a Dios).

Esto lleva a: ARREPENTIRSE. (Experimentar profundo dolor interior por haber ofendido a Dios – incluye la sensación de indignidad, aborreciendo lo malo que hizo, dijo, pensó, oyó, etc., y con la firme decisión de no volver a hacerlo).

Esto lleva a: CONFESARLE A DIOS LOS PECADOS

Esto lleva a: ROGARLE SU PERDÓN

Esto lleva a: DESEAR ESTAR EN LUZ, QUE NO HAYA NADA OCULTO, CONFESANDO LOS PECADOS. (Es importante que la confesión de situaciones delicadas o íntimas, sea con sus pastores).

APARTARSE DEL PECADO Y RESTITUIR TODO LO QUE SEA POSIBLE.

El Espíritu Santo, le enseña e incomoda sobre su pecado.

El discípulo recibe la enseñanza, por medio de quien le enseña que guarde todas las cosas que el Señor mandó.

El que ha “Nacido de nuevo”, no practica el pecado.



HAY MUCHOS...

Con tremendos sentimientos de culpa...
Que experimentan condenación en sus vidas...
Que luchan en sus mentes con deseos impuros, y se sienten derrotados...
Otros se sienten indignos y sucios...
Otros con pensamientos recurrentes de muerte...


EL DIA EN QUE JESÚS GUARDO SILENCIO


Les quiero compartir este testimonio, que no es mío, pero que será de gran bendición para sus vidas.


“Aún no llego a comprender como ocurrió, si fue real o un sueño. Sólo recuerdo que ya era tarde y estaba en mi sofá preferido con un buen libro en la mano. El cansancio me fue venciendo y empecé a cabecear...En algún lugar entre la semiinconsciencia y los sueños, me encontré en aquel inmenso salón, no tenía nada en especial, salvo una pared llena de tarjeteros, como los que tienen las grandes bibliotecas.

Los ficheros iban del suelo al techo y parecían interminables en ambas direcciones. Tenían diferentes rótulos. Al acercarme me llamó la atención un cajón titulado: “Chicas que me han gustado”. Lo abrí descuidadamente y empecé a pasar las fichas. Tuve que detenerme por la impresión, había reconocido el nombre de cada una de ellas: ¡Se trataban de chicas que a MI me habían gustado!.

Sin que nadie me lo dijera, empecé a sospechar en donde me encontraba. Este inmenso salón, con sus interminables ficheros, era un crudo catálogo de toda mi existencia. Estaban escritas las acciones de cada momento de mi vida, pequeños y grandes detalles, momentos que mi memoria ya había olvidado.

Un sentimiento de expectación y curiosidad, acompañado de intriga, empezaba a recorrerme, mientras abría los ficheros al azar para explorar su contenido. Algunos me trajeron alegría y momentos dulces; otros por el contrario, un sentimiento de vergüenza y culpa tan intensos que tuve que darme vuelta para ver si alguien me observaba.

El archivo “Amigos”, estaba al lado de “Amigos que traicioné” y “Amigos que abandoné cuando más me necesitaban”. Los títulos iban de lo mundano a lo ridículo. “Libros que he leído”, “Mentiras que he dicho”, “Consuelo que he dado”, “Chistes que conté”, otros títulos eran: “Asuntos por los que he peleado con mis hermanos”, “Cosas hechas cuando estaba molesto”, “Murmuraciones cuando mamá me reprendía de niño”, “Videos que he visto”....

No dejaban de sorprenderme los títulos. En algunos ficheros habían muchas más tarjetas de las que esperaba y otras veces menos de lo que yo pensaba. Estaba atónito del volumen de información de mi vida que había acumulado.

¿Sería posible que hubiera tenido el tiempo de escribir cada una de esas millones de tarjetas?. Pero cada tarjeta confirmaba la verdad. Cada una escrita con mi letra, cada una llevaba mi firma.

Cuando vi el archivo “Canciones que he escuchado”, quedé atónito al descubrir que tenía más de tres cuadras de profundidad y ni aún así, vi su fin. Me sentí avergonzado no por la calidad de la música, sino por la gran cantidad de tiempo que demostraba haber perdido.

Cuando llegué al archivo “Pensamientos lujuriosos” un escalofrío recorrió mi cuerpo. Sólo abrí el cajón unos centímetros...me avergonzaría conocer su tamaño. Saqué una ficha al azar y me conmoví por su contenido. Me sentí asqueado al constatar que “ese” momento, escondido en la oscuridad, había quedado registrado...No necesitaba ver más...

Un instinto animal afloró en mí. Un pensamiento dominaba mi mente: ¡ Nadie debe ver estas tarjetas jamás ¡. ¡ Nadie debe entrar jamás a este salón ¡...¡Tengo que destruirlo!. En un frenesí insano arranqué un cajón, ¡Tenía que vaciar y quemar su contenido ¡ Pero descubrí que no podía siquiera desglosar una sola del cajón. Me desesperé y traté de tirar con más fuerza, sólo para descubrir que eran más duras que el acero cuando intentaba arrancarlas.

Vencido y completamente indefenso, devolví el cajón a su lugar. Apoyando mi cabeza sobre el interminable archivo, testigo invencible de mis miserias, y empecé a llorar.

En eso el título de un cajón pareció aliviar en algo mi situación: “Personas a las que he compartido el Evangelio”. La manija brillaba, al abrirlo encontré menos de diez tarjetas. Las lágrimas volvieron a brotar de mis ojos. Lloraba tan profundo que no podía respirar. Caí de rodillas al suelo llorando amargamente de vergüenza. Un nuevo pensamiento cruzaba mi mente: ¡Nadie deberá entrar a este salón, necesito encontrar la llave y cerrarlo para siempre!.

Y mientras me limpiaba las lágrimas, lo vi: ¡Oh no!. ¡Por favor no! ¡Él no! ¡Cualquiera menos Jesús!.
Impotente vi como Jesús abría los cajones y leía cada una de mis fichas. ¡No soportaría ver su reacción!.

En ese momento no deseaba encontrarme con su mirada. Intuitivamente Jesús se acercó a los peores archivos. ¿Por qué tiene que leerlos todos?. Con tristeza en sus ojos, buscó mi mirada y yo bajé la cabeza de vergüenza me llevé las manos al rostro en empecé a llorar de nuevo. Él, se acercó, puso sus manos en mis hombros. Pudo haber dicho muchas cosas, pero Él no dijo una sola palabra. ¡Allí estaba junto a mi en silencio!. Era el día cuando Jesús guardó silencio... y lloró conmigo.

Volvió a los archivadores y desde un lado del salón, empezó a abrirlos, uno por uno, y en cada tarjeta firmaba su nombre sobre el mío. ¡No!, le grité corriendo hacia Él, lo único que atiné a decir fue sólo ¡No!, ¡No!, ¡No!, cuando le arrebaté la ficha de su mano. Su nombre no tenía que estar en esas fichas. ¡ No eran sus culpas¡. ¡Eran las mías! . Pero allí estaban, escritas en un rojo vivo. Su nombre cubrió el mío, escrito con su propia sangre. Tomó la ficha de mi mano, me miró con una sonrisa triste y siguió firmando las tarjetas. No entiendo como lo hizo tan rápido. Al siguiente instante lo vi cerrar el último archivo y venir a mi lado.

Me miró con ternura a los ojos y me dijo: “Consumado es, está terminado, yo he cargado con tu vergüenza y culpa”.

En esto salimos juntos del salón...Salón que aún permanece abierto...Porque todavía faltan más tarjetas que escribir...

Aún no se si fue un sueño, una visión o una realidad...Pero de lo que estoy convencido, es que la próxima vez que Jesús vuelva a ese salón, encontrará más fichas de que alegrarse, menos tiempo perdido, y menos fichas vanas y vergonzosas. “



UN LLAMADO


Para algunos este es el momento de arrepentirse y entregarse por primera vez a Jesús.

Para otros este es el momento de arrepentirse y volver a Jesús y decirle en qué le ofendieron y pedirle perdón.

A todos los que se arrepienten profundamente, Jesús los está esperando, para poner su firma con su propia sangre...sobre la suya . Y librarlos de culpa... de vergüenza... de pecado.


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